El mundo es un mosaico de historias, un espacio compartido donde las crisis, aunque parezcan lejanas, tienen raíces comunes: el cambio climático, los conflictos armados, los desastres naturales y la pobreza. Este año, “Corre por una Causa” nos invita a reflexionar y actuar por quienes más lo necesitan: la infancia en emergencia.
Millones de niñas y niños en el mundo han sido obligados a abandonar sus hogares debido a conflictos, desastres naturales o violencia. Desde las crisis internacionales en Líbano, Chad y Tanzania, hasta las devastadoras consecuencias de la DANA en Valencia, el mensaje es claro: somos parte de un mismo mundo, donde nuestras acciones locales tienen eco global, y las soluciones globales empiezan por la solidaridad local.
Esta carrera tiene como objetivo recaudar fondos para ofrecerles un espacio seguro donde puedan aprender, jugar y crecer con dignidad y esperanza.
Guerras, violencia, catástrofes naturales o situaciones de pobreza extrema obligan a más de 100 millones de personas a abandonar sus hogares. Situaciones que afectan especialmente a la infancia, alejándola de su entorno, de su escuela y de sus oportunidades de futuro.
Más de 43 millones de niños y niñas en el mundo son refugiados, desplazados y migrantes.
Niños y niñas que se enfrentan a una nueva vida, llena de miedo e incertidumbre, y que necesitan recuperar su derecho a la educación en los lugares de acogida. En la emergencia, la educación es el primer derecho que se pierde y el que más tarda en recuperarse.
Junto a nuestras organizaciones socias, desde Entreculturas y Alboan trabajamos para que accedan a la educación: la escuela les ayuda a superar los traumas, aporta normalidad a sus vidas y les da un espacio de acogida y de inclusión.
Guerras, violencia, catástrofes naturales o situaciones de pobreza extrema obligan a más de 100 millones de personas a abandonar sus hogares. Situaciones que afectan especialmente a la infancia, alejándola de su entorno, de su escuela y de sus oportunidades de futuro.
Más de 43 millones de niños y niñas en el mundo son refugiados, desplazados y migrantes.
Niños y niñas que se enfrentan a una nueva vida, llena de miedo e incertidumbre, y que necesitan recuperar su derecho a la educación en los lugares de acogida. En la emergencia, la educación es el primer derecho que se pierde y el que más tarda en recuperarse.
Junto a nuestras organizaciones socias, desde Entreculturas y Alboan trabajamos para que accedan a la educación: la escuela les ayuda a superar los traumas, aporta normalidad a sus vidas y les da un espacio de acogida y de inclusión.